La red social X, antes conocida como Twitter y propiedad de Elon Musk, presentó una demanda contra el fiscal general de Minnesota, Keith Ellison, argumentando que la ley estatal que prohíbe el uso de deepfakes para influir en elecciones viola la libertad de expresión. Según la demanda, la norma es tan ambigua que podría obligar a las plataformas a censurar contenido legítimo por miedo a sanciones penales. La ley, además, inhabilita a candidatos condenados por su uso. Ellison enfrenta también otras disputas legales con la administración Trump, incluyendo su defensa de los derechos de personas trans en deportes escolares.