La visita de Max Verstappen al continente americano se ha vuelto complicada debido a la creciente tensión y descontento por su actitud y los resultados de Checo Pérez en las carreras. El piloto neerlandés no la pasó bien en Austin, Texas, donde fue abucheado en el podio. Ahora, se prepara para enfrentar posibles críticas y hostilidades por parte de los aficionados mexicanos.
Red Bull ha decidido reforzar la seguridad de Max Verstappen en México asignándole dos guardaespaldas, según confirmó Helmut Marko para F1-Insider.com. Aunque Verstappen ha expresado que no le preocupa la situación y que su principal objetivo es ganar carreras, el equipo asume la responsabilidad de mantenerlo seguro.
El motivo detrás de esta decisión no se ha revelado oficialmente, ya que Marko ha optado por guardar silencio al respecto. Sin embargo, F1-Insider.com informa que la medida se debe a las amenazas que Verstappen ha recibido en las redes sociales, y Red Bull busca evitar cualquier incidente grave.
Incluso su compañero de equipo, Checo Pérez, ha tomado medidas para garantizar la seguridad de Verstappen. En una conferencia de prensa, Pérez solicitó a los aficionados mexicanos que se comporten de manera respetuosa y disfruten del espectáculo automovilístico.
La seguridad de los pilotos de Fórmula 1 es de suma importancia, y Red Bull está tomando precauciones adicionales para garantizar la protección de Max Verstappen en México, dadas las circunstancias actuales.