En Minnesota, se considera convertir en delito grave el “swatting”, una práctica de hacer llamadas falsas a servicios de emergencia para enviar a la policía a casas de terceros. La propuesta busca penalizar a quienes realicen estas llamadas, especialmente si apuntan a funcionarios públicos o agentes del orden. La iniciativa responde al creciente uso de esta táctica, que no solo desperdicia recursos, sino que también puede ser peligrosa. La pena propuesta incluye hasta un año de prisión y multa de $5,000 para los culpables. La medida cuenta con apoyo bipartidista y busca proteger a los servicios de emergencia y a la comunidad en general.