Un tornado devastador azotó la pequeña ciudad de Greenfield, Iowa, dejando a su paso múltiples muertes y una escena de destrucción generalizada, según informa la Patrulla Estatal de Iowa. Aunque aún no hay un recuento definitivo de las fatalidades, las autoridades estiman que todos los residentes de la ciudad de 2,000 personas han sido contabilizados. Al menos una docena de personas resultaron heridas en el desastre, que también dañó viviendas, negocios e incluso un centro de jubilados. Se han establecido refugios para los afectados, mientras que se ha implementado un toque de queda nocturno. Los esfuerzos de búsqueda y limpieza continúan, mientras los residentes se enfrentan a la devastación.