El Presidente Biden anunció restricciones en la frontera con México para limitar el asilo. Esta medida responde al intento de resolver la inmigración como tema político antes de las elecciones de noviembre. La proclamación presidencial busca controlar la situación fronteriza ante el fracaso de un acuerdo bipartidista en el Congreso. La nueva política permite la expulsión inmediata de migrantes en ciertas circunstancias. Aquellos que soliciten asilo serán evaluados bajo un estándar más estricto. Biden sostiene que la inmigración es parte del tejido de EE. UU. y critica la manipulación política de Trump. Las medidas entrarán en vigor cuando los encuentros en la frontera alcancen cierto umbral. Mientras tanto, organizaciones como Global Refuge expresan preocupación por la limitación al derecho de asilo.