Comienza la guerra civil en las campañas electorales y la congresista Ilhan Omar enfrenta acusaciones de fraude relacionadas con el negocio de su esposo, Tim Mynett. Aunque Omar no está directamente involucrada, su oponente Don Samuels dice que ella se benefició, ya que la firma recibió $3 millones de su campaña de 2020. Hace una década, el propio Samuels fue investigado por el FBI por un caso similar, pero fue absuelto. En este momento no hay registro de ninguna investigación criminal contra el conygue de Omar y la oficina de la Congresista señala que ella no tiene participación en los negocios del marido, por lo que califican los señalamientos, como un intento desesperado de obtener la candidatura del partido para contender por el quinto distrito.