Un juez federal bloqueó temporalmente la orden de Donald Trump de congelar el gasto federal, evitando su aplicación hasta el lunes 3 de febrero. La decisión da un respiro a programas esenciales en Minnesota, como seguridad pública, educación y salud. El gobernador Tim Walz criticó la medida de Trump y la calificó de irresponsable, advirtiendo que afectaría a agricultores, veteranos y familias trabajadoras. Mientras tanto, persisten preocupaciones sobre el impacto en programas como Medicaid, aunque la administración Trump asegura que algunas interrupciones en servicios no están relacionadas con la orden.