Para quienes acostumbran acudir a hacer ejercicio o nadar en las instalaciones del YMCA tanto en el Downtown y en el Uptown de Minneapolis, tendrán que elegir una nueva opción para llevar a cabo estas actividades a partir de noviembre. La organización anunció ayer jueves que replanteará su operación y como parte de ello, estas áreas dejaran de funcionar. Señalan que dirigirán sus esfuerzos a los programas de justicia racial y educación temprana y por ello venderán sus actuales instalaciones para comprar otras más acorde al nuevo objetivo. El cierre dejará también sin empleo a 85 personas, según afirmaron quienes actualmente laboran en estas áreas.