Lo que debió haber sido una celebración de cumpleaños, se convirtió en una tragedia por la muerte de un niño de 12 años que recibió un disparo de arma de fuego. Según la policía de St. Paul, el joven Markee Jones, de 12 años, fue llevado al hospital con una herida de bala proveniente de la cuadra 200 de Stinson Street. En el lugar fue detenido otro adolescente de 14 años quien supuestamente accionó el arma que privó de la vida al menor. Declaraciones preliminares indican que uno de los invitados llevó el arma y que mientras estaban jugando con ésta, se disparó con los resultados ya conocidos.