El Senado reanudó este lunes el debate sobre el polémico megaproyecto fiscal de Donald Trump, tras un fin de semana lleno de tropiezos. La votación maratónica de enmiendas —conocida como vote-a-rama— fue pospuesta, pero ya está en marcha, mientras republicanos intentan cumplir con la autoimpuesta fecha límite del 4 de julio.
El proyecto incluye 4 billones de dólares en recortes fiscales, en su mayoría para los más ricos, y reducciones drásticas a Medicaid y asistencia alimentaria. Según la Oficina de Presupuesto del Congreso, 11.8 millones de personas perderían cobertura médica y el déficit crecería en casi 3.3 billones de dólares en diez años.
Demócratas están unidos en contra y han prometido alargar el debate con enmiendas. El resultado sigue incierto, y senadores republicanos como Thom Tillis han mostrado rechazo, incluso anunciando su retiro tras oponerse públicamente a los recortes de salud.