La alianza anunciada entre Allegiant Airlines, con sede en Las Vegas y la empresa mexicana Viva Aerobus, ha quedado aplazada en forma indefinida por las autoridades del Departamento de Transporte de los Estados Unidos. La propuesta de la dos aerolíneas de bajo costo pretendía ampliar las rutas de ambos lados de la frontera, ofreciendo más destinos a costos accesibles pero aparentemente la práctica monopólica que el actual régimen de México ha estado llevando a cabo, con el fin de forzar a las aerolíneas a mudarse al nuevo aeropuerto de Santa Lucía así como su insistencia por establecer una línea aérea gubernamental, encendió los focos rojos en las autoridades de los Estados Unidos, quienes en una carta expresaron que no podrían cumplir con los plazos establecidos, en tanto no se tuviera una certeza de que México iba a respetar los acuerdos internacionales vigentes.
