Además del posible impacto en los servicios de salud pública, el plan presupuestario aprobado por la Cámara de Representantes busca allanar el camino para significativos recortes fiscales. Aunque aún se deben definir los detalles, los mayores beneficios irían a parar a grandes corporaciones y personas con altos ingresos, gracias a una menor carga tributaria. Donald Trump ha promocionado la medida como un paso hacia “la mayor reducción de impuestos en la historia” de Estados Unidos, organizaciones civiles, sin embargo, alertan sobre el aumento de la desigualdad.