El departamento de policía de Minneapolis operará bajo nuevas reglas que restringen cuándo los agentes pueden realizar paradas de tráfico por infracciones menores. Según los términos de un nuevo acuerdo de conciliación entre la ciudad y el Departamento de Derechos Humanos de Minnesota, los agentes de la corporación no podrán detener a conductores con el único propósito de infracciones como calcomanías de matrícula vencidas, problemas en las placas, luces o espejos rotos, o falta de señalización al dar vuelta, entre otros. Sin embargo, los agentes podrán realizar estas paradas si consideran que existe un riesgo para la seguridad pública. Este acuerdo surge a raíz de estadísticas que muestran que la mayoría de estas detenciones afectan a personas afroamericanas.