Los votantes de las Twin Cities aprobaron varias preguntas de papeleta destinadas al mantenimiento de los servicios públicos de la ciudad, así como proyectos para el uso futuro de sus residentes, con aumento en impuestos. La más relevante fue la de St. Paul, donde se les pidió a los residentes votar sobre el establecimiento de un impuesto sobre las ventas del 1% durante los próximos 20 años para generar $738 millones para reparar y mejorar calles y puentes, y $246 millones para mejorar instalaciones de parques y recreación. Cuando el nuevo impuesto entre en vigor el 1 de abril de 2024, St. Paul tendrá la tasa de impuesto sobre ventas más alta del estado, con un 9.875%.