En un emocionante enfrentamiento, Saúl “Canelo” Álvarez logró retener su título indiscutido en la división de los supermedianos al vencer a Jermell Charlo por decisión unánime. Las tarjetas de los jueces marcaron un contundente 119-108, 118-109 y 118-109 a favor del boxeador mexicano.
A pesar de que Canelo no pudo conseguir un nocaut en esta ocasión, su actuación fue destacada, demostrando su agresividad y habilidad en el ring. La pelea comenzó con un primer round de reconocimiento, pero en el segundo asalto, Canelo mostró su poderío al conectar un sólido volado de derecha que comenzó a marcar la pauta.
A medida que avanzaba la pelea, Canelo continuó presionando a Charlo, quien se encontraba en las cuerdas. En el cuarto asalto, Charlo intentó responder con una combinación de izquierda, pero Canelo lo contrarrestó con un gancho de izquierda al cuerpo que afectó al estadounidense.
El séptimo asalto fue el punto culminante de la pelea, ya que Canelo logró derribar a Charlo con un fuerte volado de derecha a la cara. A medida que avanzaba la pelea, Charlo mostró signos de fatiga y se volvió más estático, lo que permitió a Canelo aprovechar con ganchos a las costillas y volados a la cabeza.
A pesar de un intento de Charlo en el octavo asalto, donde se lanzó hacia Canelo, se notaba que el peso de la pelea estaba pasando factura al estadounidense, quien se volvía cada vez más lento y recurría al abrazo con frecuencia.
Aunque Canelo no logró el nocaut, su actuación sólida y dominante le permitió retener su título de supermedianos en una victoria por decisión unánime.
